Monday, January 05, 2009

Me vi mirandome a mi mismo y desperte.


Desde pendejo mi corazón ha latido fuerte al ritmo del rock n roll y confieso, sin ninguna verguenza, que muchas veces toqué el cielo haciendo el loco encerrado en mi pieza imitando los riff que retumbaban en las paredes.

Mas de una vez soñé despierto con estar sobre un escenario y reventarme el alma tocando esas interminables melodías que brotaban desde algún rincón profundo y misterioso de la imaginación.

Siempre quise tocar en una banda, ¿Y quien no?

Las circunstancias de la vida, la porfía y ese deseo incansable a larga dieron un fruto, un elixir agridulce y psicotrópico llamado Ecosidio.

Lo logré!, podría gritar lleno de jubilo, pero NO.
Otras preguntas surgen reclamando respuestas.

¿Y ahora que?. Toco en una banda, ¿y para que?

Guiado por mis creencias abrasé la lucha contra todo tipo de injusticia y abusos de poder y en eso basé mi verso, y aunque muchos no lo sepan o no lo crean, también en ello fundé los principios básicos de mi vida diaria. (por ahí el costo a sido alto)

Muchas veces enarbolé la bandera de una resistencia intelectual, consiente y coherente contra una sociedad que se funda en el egoísmo y en la acumulación morbosa de riquezas y me enorgullezco de ello.

Siempre quise cambiar el mundo y usé lo único que tenía:
el rock n roll.

Al final, un sueño de niño del que acabo de despertar.

Rodrigo "El Ciego" Neira